Reclaman justicia integrantes del grupo proceso evangelizador de la catedral, en presunto caso de violación.
Integrantes del grupo Proceso Evangelizador de la Catedral de Oaxaca, exigieron a las autoridades esclarecer la presunta violación a un joven catequista ocurrido en Catedral el pasado mes de marzo durante la Semana Santa.
De acuerdo con Laura, coordinadora de este grupo y testigo de lo sucedido, el Jueves Santo, el joven llamado Lenin López Jiménez se quedó a dormir en la Catedral, por lo que, al día siguiente, esta persona acudió al área de los dormitorios donde se encontró al joven con los pantalones rasgados y sin camisa.
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Se percató del olor que despedía la habitación y fue en busca de los padres del menor. “El poder económico y político del Arzobispo de Oaxaca, José Luis Chávez Botello logró poner en libertad al vicario de la Catedral Metropolitana, Carlos Franco Pérez quien fue acusado y apresado por violar a un joven catequista el pasado mes de abril.
“Las autoridades eclesiásticas se negaron en todo momento a presentar las pruebas que les fueron solicitadas tanto de la parte afectada así como de las autoridades judiciales quienes ante la ausencia de las mismas el sacerdote abandonó los separos”, afirmó.
Familiares y amigos de Lenin Moisés López Jiménez, presunta víctima del párroco, relataron los hechos que se suscitaron en el mes de abril durante la conmemoración de la Semana Santa.
La coordinadora del Proceso Evangelizador en Catedral, Laura Antonio Zaragoza responsabilizó tanto al arzobispo así como a Franco Pérez de cualquier situación en su contra y de la víctima de violación.
El presbítero Carlos Franco Pérez Méndez, acusado de violar a un joven, fue puesto en libertad ante la falta de pruebas; tras haber sido detenido el psado viernes 15 de julio.
En la denuncia, la víctima señala que los hechos se suscitaron el 25 de marzo, en la última semana de Cuaresma de 2016. Ese día el agraviado relata que, junto con un catequista y el padre Carlos Franco, ingirieron bebidas alcohólicas, incitados por el sacerdote.
Fue a las 1:00 horas cuando el párroco, en estado de ebriedad, violó al agraviado, quien en su declaración señala que después de los hechos el padre no se presentó al Viacrucis a la mañana siguiente.
La denuncia penal se realizó cuatro días después, el 29 de marzo, y el 10 de abril el sacerdote fue separado de su cargo en la iglesia católica de Oaxaca.
Fue hasta este jueves, 14 de julio, que fue detenido por elementos de la Agencia de Investigaciones (AEI) y trasladado al CERESO mencionado en Miahuatlán.
Pero fue después del término constitucional (72 horas que permite el artículo 260 del código de procedimientos penales del estado de Oaxaca), el inculpado quedó a disposición del juzgado, quien dictó que las pruebas fueron insuficientes, ya que en la denuncia el joven afirmó que el sacerdote involucrado no se presentó a la simulación de la pasión de Jesús, pero corroboraron la presencia de Carlos Franco en la celebración, con pruebas de vídeo en las que se le ve participar el 25 de marzo.
