Muere normalista por negligencia y falta de atención médica en Tamazulapam

Escuela Normal “Vanguardia” de Tamazulapam, murió por la negligencia de los directivos del plantel que le impidieron salir a recibir atención médica a una clínica; la institución carece del servicio porque la dirigencia de la Sección 22 no aceptó al especialista enviado por el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO).

Se trata de Lizbeth “N”, estudiante del primer semestre; cuya muerte ocurrió la noche del miércoles en el Hospital Regional de Huajuapan de León, a consecuencia de un aneurisma cerebral.

Originaria de Motozintla Chiapas, la mujer fue internada en estado grave de acuerdo a las mismas autoridades del nosocomio, y no recibió atención medica oportuna debido a que no le permitieron salir, acciones consideradas “normales” y que forman parte de los abusos que cometen con las alumnas de nuevo ingreso.

De acuerdo a testigos y familiares, Lizbeth Nohemí Escalante Pérez, de 18 años de edad, originaria de Motozintla, Chiapas empezó a sentirse mal el miércoles 18 de octubre, y tuvo una hemorragia, por lo que tuvo que ser trasladada a una clínica para su atención.

Una fuente del mismo Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca, informa que desde hace una semana, la ahora extinta empezó a sentirse mal y el comité estudiantil continuó exigiéndole trabajos forzados en la escuela, sólo hasta que se puso grave y tuvo desmayos y crisis de ataques, la canalizaron al hospital en donde murió.

La Sección 22 no aceptó la llegada del médico a la Normal de Tamazulapam, alegando que era personal nombrado en base a los lineamientos de la Reforma Educativa, por lo que le impidieron el acceso y la escuela se quedó sin servicio médico profesional.

La estudiante fue trasladada muy grave al hospital “Pilar Sánchez Villavicencio” en Huajuapan de León, donde alrededor de las 5 de la mañana perdió la vida por complicaciones.

Los Servicios de Salud de Oaxaca confirmaron el deceso de la estudiante la noche del miércoles, “a consecuencia de un aneurisma cerebral, que debió de haber sido atendido con urgencia”.

Lizbeth cursaba el primer semestre, era una joven que fue sometida a un duro adoctrinamiento que mermó su salud. Ya tenía días con síntomas, pero no se le permitió acudir a un médico, ni tampoco se le proporcionó atención. En el acta de defunción se anotó que fue víctima de aneurisma cerebral.