El rector de la UABJO pide mayor presupuesto, pero huye para evitar preguntas


Oaxaca. Oax.- En la ciudad de Oaxaca, el rector de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), Eduardo Bautista Martínez, aplicó el dicho: «Aquí corrió que aquí quedó».

Pues prefirió salir en media conferencia como cuál diplomático, para evitar cuestionamientos de la prensa, aun cuando mando a traer a integrantes Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios (CONTU), para que lo respaldarán en su queja de que no tiene dinero para cubrir pagos.

El rector dio su discurso de que no tiene dinero y como pudo se salió para evitar preguntas quizás “incómodas”.

El presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios (CONTU), Enrique Levet Gorozpe , amago con un paro nacional, porque argumenta que no tiene dinero para superar sus pagos en este año.

En este sentido, abundo que en este momento son 10 universidades las que se encuentran crisis académica y el próximo año serán 21 las universidades afectadas.

La Universidad va en decadencia en cuanto a calidad educativa, de los estudios hechos a nivel nacional sobre las mejores universidades del país en ninguna aparece la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca.

Abundó que si bien las autoridades federales gastan dinero en publicidad, deben asignar más dinero para la educación.

Asimismo, aseguró que el Gobierno federal gasta de manera excesiva dinero en campañas publicitarias, sin tomar en cuenta el presupuesto que se destina a las universidades.

El Alma Mater de los oaxaqueños atraviesa por la peor etapa de su historia: paros y tomas constantes, baja calidad educativa y una crisis económica que se ahonda y que mantiene en “vilo” el cumplimiento de pagos de salarios y aguinaldos para fin de año.

El secretario general de la CONTU, Enrique Levet Oropeza aseguró que durante la Asamblea General Ordinaria de la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios, donde están participando 62 sindicatos de trabajadores, se definirá un paro de labores en más de 30 universidades públicas.

La máxima casa de estudios de los oaxaqueños se mantiene tomada por integrantes del Sindicato de Trabajadores y Empleados de la Universidad que estallaron un paro de labores indefinido «por el incumplimiento en las jubilaciones de agremiados y falsedades publicadas en medios nacionales sobre nuestras prestaciones laborales», señalan los quejosos.

La situación afecta a alrededor de 20 mil universitarios de las 9 facultades que se encuentran al interior del CU y quienes constantemente enfrentan un escenario de toma de la Universidad por causas que desconocen.

A la situación de tomas se añada la crisis económica por la que atraviesa la universidad pública que no ha podido superar y que podría evitar que se cumpla a tiempo con el pago de la nómina y aguinaldos de trabajadores de fin de año.

De acuerdo a personal de la UABJO, la nómina asciende a 30 millones de pesos y una cantidad similar o más se requiere para cubrir los aguinaldos, dinero que la administración central no tiene en caja.

Para pagar la segunda quincena de octubre, cuando se reportó dificultades financieras, se solicitó un adelanto que tomaron de lo correspondiente a noviembre. Mientras que para salvar el mes de noviembre se solicitará un nuevo adelantó económico de lo que corresponde a diciembre, “pero en diciembre no habrá quincenas, ni aguinaldos ni de más prestaciones”, aseveró.

La situación del Alma Mater se complica porque los gobiernos federal y estatal no quieren aportar nada adicional, aún cuando la UABJO es de las universidades que recibe menor presupuesto en el país.

El presupuesto autorizado para este año es de 949 millones de pesos, pero rectoría solicitó un ampliación de por lo menos 250 millones de pesos para poder salvar medianamente sus necesidades.

En el caso de los jubilados el asunto es mucho peor, porque los gobiernos no aportaron ni un solo peso y parte del presupuesto se va al pago de este sector.

La UABJO se extravió en disputas. Oscila entre un sindicalismo pernicioso, un faccionalismo enfermizo y la idea –torpe, por supuesto- de que una institución pública puede ser patrimonio personal o familiar. Pareciera ser que la mediocridad y la decadencia se han enquistado en lo que fue una universidad gloriosa y formativa de grandes hombres.

Ha sido, a la vez, campo de batalla: balaceras, bloqueos, incendios y el manipuleo de aquellos que, desde la penumbra de su cobardía, mueven los hilos.

La búsqueda de la excelencia académica; el desempeño para lograr la formación de profesionistas en lo posible y razonable, se ha ido a la basura. La lucha por la supremacía; la prevalencia de los vicios y los cotos de poder, es lo que vale.

De la decadencia académica y el desorden administrativo, la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca pasó al desastre financiero, al grado que la administración central de la UABJO está en serios aprietos para el pago de aguinaldo de sus más de tres mil trabajadores, docentes, administrativos y manuales.

El Rector Eduardo Bautista Martínez desconoce totalmente el manejo de la Universidad, y en comentarios con sus allegados, ha llegado a reconocer y lamentar que, de haberlo sabido cómo está la UABJO, no se habría involucrado en la Rectoría.

La reducción en el subsidio federal coloca a la UABJO en los más bajos niveles, en comparación con otras universidades del país, y se ve difícil el aumento de este subsidio en los años siguientes, ya que una de las condiciones fundamentales para su incremento es que la Universidad demuestre ser un ente académico, pero como están las cosas se ve difícil lograr.

El presunto desfalco del ex rector Eduardo Martínez Helmes y su socio Jorge Castillo, el ex Virrey del Gobierno estatal a las arcas universitarias, ha denunciando a través de medios de comunicación.

De acuerdo a versiones de universitarios, una de las causas del presunto desfalco es el pago de nómina confidencial en la modalidad del outsourcing por medio de la empresa Taxx Answers, S. A. de C. V. administrada por Arturo Pérez Aquino.