Fuerte tormenta derriba dos torres del Taj Mahal 


Una fuerte tormenta ha derribado dos minaretes decorativos de piedra en la entrada al complejo arquitectónico del Taj Mahal, sin que el monumento principal haya sufrido daños.

Nueva Delhi.- Una fuerte tormenta ha derribado dos minaretes decorativos de piedra en la entrada al complejo arquitectónico del Taj Mahal, sin que el monumento principal haya sufrido daños, informó hoy a Efe una fuente oficial.

Una alargada columna con forma de minarete de la gran puerta que da acceso al Taj Mahal se rompió anoche a causa del viento, al igual que una segunda en la puerta sur del complejo, explicó Kamei Athoilu Kabui, superintendente adjunta del Servicio Arqueológico de la India (ASI) en Agra, la ciudad norteña india que alberga el mausoleo.

“Todavía no puedo decir nada sobre los daños, pero un equipo de ingenieros y arquitectos está inspeccionando la zona y solo después planificarán su restauración”, añadió.

En varias fotografías del suceso publicadas en medios locales se observa la parte superior de la columna en el suelo, rota por varias partes, a los pies de la gran puerta de piedra roja.

Kabui señaló que los trabajos de restauración no impedirán a los turistas visitar el Taj Mahal, al que cada día acuden miles de personas.

Es la primera vez que una tormenta daña uno de los edificios de ese complejo, concluyó.

En los últimos meses, las autoridades indias han impuesto varias medidas para tratar de dar solución a las aglomeraciones y al problema del exceso de público, entre ellas limitar las visitas a tres horas y una subida del precio de la entrada para el público indio.

El Taj Majal es uno de los monumentos más visitados del mundo, se construyó entre 1631 y 1648 por el emperador Shah Jahan como un monumento funerario en honor a su fallecida esposa Mumatz Mahal, y supuso una inversión descomunal para la época, empleando a los arquitectos más sobresalientes y los materiales más preciosos y nobles de todo el mundo.

En 1983 fue declarado patrimonio de la humanidad y en 2007 elegido como una de las siete maravillas del mundo moderno.