“Estamos estudiando esta reforma y estamos viendo qué se tiene que hacer», afirmó el secretario de Hacienda, José Antonio González Anaya
Como “regresiva”, calificó el secretario de Hacienda, José Antonio González Anaya, la reforma fiscal en Estados Unidos. En un contexto en el cual la economía estadounidense está muy cerca del empleo pleno, “hacer una baja de impuestos y un aumento en el déficit no parece ser lo más recomendable”, consideró.
Algunas estimaciones señalan que 1.0% de los contribuyentes más ricos se llevan cerca de 40% del beneficio que implica la disminución de impuestos aprobada, entre ellos una reducción en el Impuesto sobre la Renta (ISR) corporativo.
“Estamos estudiando esta reforma y estamos viendo qué se tiene que hacer. En primer lugar, hay que señalar que México es un país competitivo y la parte fiscal no determina la competitividad de un país”. Si así fuera, apuntó González Anaya, Haití y Bolivia serían los países más competitivos porque son los que menos recaudan.
Recordó que la Secretaría de Hacienda ha instalado mesas de trabajo con diferentes cúpulas del sector privado para analizar el tema, en las cuales el consenso es que no se deben debilitar las finanzas públicas.
A diferencia de México, comparó González Anaya, Estados Unidos sí puede aumentar su déficit fiscal sin que pase nada, porque su moneda, el dólar, es la reserva del mundo.
Las repercusiones de la reforma fiscal, junto con el proceso electoral a nivel interno y la renegociación en curso del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) son los tres temas relevantes para la economía mexicana.
Al referirse a la elección presidencial, señaló que si bien México lleva décadas en el cual su democracia va modernizándose es inevitable que haya periodos de incertidumbre, son normales, afirmó.
Del TLCAN, cuya sexta ronda de renegociación se llevará a cabo del 23 al 28 de enero, González Anaya recordó que el año pasado, en esas mismas fechas Estados Unidos se salió del Acuerdo Estratégico Transpacífico de Asociación Económica (TPP), y había una enorme incertidumbre de qué iba a pasar con el acuerdo comercial trilateral entre México, Estados Unidos y Canadá.
Ahora, van cinco rondas de negociación exitosas, dos capítulos concluidos, y capítulos con acuerdos importantes, “hay método y proceso de esto. Estoy seguro que llegaremos a un buen puerto en eso”.
