Titular de Cofepris afirma que había corrupción en todas las áreas

  • José Alonso Novelo, titular de la Cofepris, indicó que se encontró deterioro en el funcionamiento, discrecionalidad y falta de transparencia en los procesos

El titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), José Alonso Novelo Baeza, pidió no ver ni hacer de la salud una mercancía, ya que es un derecho y patrimonio de la humanidad.

Dijo que al llegar a este organismo dependiente de la Secretaría de Salud, encontraron corrupción en todas las áreas: en farmacovigilancia, en terceros autorizados en moléculas nuevas, por mencionar algunas.

Pero no se trata de “cazar fantasmas”, sino de tomarse la salud en serio y trabajar en bien de la población, destacó el funcionario durante su comparecencia ante el Senado.

Dijo que en el primer diagnóstico se encontró deterioro en el funcionamiento, discrecionalidad y falta de transparencia en los procesos; las decisiones reguladoras estaban capturadas por grupos de interés económico, también hay conflictos de interés y deficiencia en captaciones de reportes de reacciones adversas en medicamentos, entre otros.

De los terceros autorizados que surgieron de una supuesta necesidad porque la Cofepris no tenía capacidad para atender toda la demanda, según se dijo en la administración pasada, se halló a 222 entes de esta naturaleza lo que hace sospechar de un abuso de esta figura que deberá revisarse, detalló.

“No todos los terceros autorizados son malos, hay buenos, regulares y otros que se portan mal, hay que evaluar dónde están las fallas”, subrayó.

De igual forma, Novelo Baeza se pronunció por fortalecer a la industria farmacéutica nacional, evitar las prácticas que retrasan la salida de medicamentos genéricos y de confluir en los mismos intereses para mantener la buena relación con los laboratorios nacionales y extranjeros.

Agregó que la dependencia debe recuperar su carácter regulador, pues las últimas administraciones la convirtieron en una agencia facilitadora al servicio de los intereses industriales y económicos.

Indicó que se olvidó su función primordial de proteger a la población de los riesgos que atentan contra su salud.