Del infierno al paraíso: Elefanta chilena se traslada a santuario en Brasil tras 40 años de maltrato

Los animales silvestres nacieron para estar libres en su hábitat natural, no para vivir encerrados en hostiles lugares donde reciben un trato humillante por parte de los seres humanos. La siguiente noticia me hizo creer nuevamente en la humanidad.

Ramba, un elefante conocida en Chile por sobrevivir más de 40 años de maltratos en diferentes circos del país, finalmente será trasladada a un santuario en Brasil. El animal dejará atrás su pasado lleno de dolor y comenzará una nueva vida en un sitio donde compartirá con sus pares. Su sueño hecho realidad.

Tras ser rescatada de su último infierno, Ramba fue ingresada al Parque Safari de Rancagua, lugar donde pasó los último siete años. Le curaron sus heridas y fue tratada dignamente pos sus cuidadores, tal como contó Iván Sánchez, dueño del recinto a LUN. Por primera vez en su vida recibió amor de verdad.

«Llegó con problemas en sus extremidades y mucho estrés, seguramente porque estaba en un circo. Tenía un bailoteo, se encerraba, le tiritaba su cuerpo y eso afortunadamente se le quitó».

-Iván Sánchez, dueño de Parque Safari de Rancagua a LUN-

Viajará 36 horas vía aérea y terrestre hasta Brasil. La travesía tiene un valor de 135 mil dólares, monto que será subsidiado principalmente por la empresa Amarula. Para calmar sus nervios, será tratada con terapia floral.

Joaquín González, Brand Manager de Amarula Chile, hicieron una campaña para recaudar fondos y poder costear el trayecto.

«Siempre hemos tenido un fuerte compromiso por la vida de los elefantes, estos grandes gigantes que sufren en manos de cazadores furtivos que lo buscan por su marfil en África y, en el caso de Chile, Ramba, la cual apoyamos a través de la campaña Corazón de Elefante, donde se donó $500 pesos por botella vendida, para así trasladarla al Santuario de Elefantes ubicado en Brasil, donde podrá socializar con otros de su especie y llevar, finalmente, una vida normal y sana».

La idea es que Ramba vuelva a su vida cotidiana lo más rápido posible. Ha sufrido tanto que merece ser feliz el tiempo que le quede en este mundo. Qué mejor que hacerlo en un ligar cargado de energías positivas. Un final feliz para ella.