Noticias de Coronavirus opacan reporte de pérdidas de Pemex en 2019 por 346 mil mdd

  • En los próximos meses se irán consolidando iniciativas para alcanzar el equilibrio financiero hacia 2021; los resultados están determinados aún por la inercia de últimos años, indica la petrolera.

En 2019 Petróleos Mexicanos (Pemex) tuvo pérdidas por 346 mil 135 millones de pesos, cifra 92 por ciento mayor a los 180 mil 420 millones del cierre de 2018, afectado principalmente por menos ingresos en ventas y exportaciones, esto pese al primer año de reestructura que está llevando a cabo la nueva administración para mejorar los indicadores operativos y financieros de la empresa.

En sus resultados consolidados al cierre de 2019, la empresa productiva del Estado explicó que los ingresos totales por ventas en México cayeron 17.5 por ciento, a 808 mil 522 millones de pesos, una diferencia de 172 mil 38 millones respecto a 2018; las ventas de exportación retrocedieron 15.3 por ciento, para alcanzar los 585 mil 831 millones, una variación de 106 mil 56 millones de pesos.

Recientemente el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF) alertó que la fragilidad de Pemex puede requerir medidas políticamente sensibles como recortar las transferencias sociales. También el Banco de México (Banxico) ve como un riesgo para el crecimiento de 2020 y 2021 el deterioro adicional en la calificación de la deuda de la petrolera o en la soberana.

Al respecto, el gobernador del Banxico, Alejandro Díaz de León, recordó hace días que se han llevado a cabo acciones para refinanciar los pasivos de la empresa, pero las calificadoras han manifestado su preocupación por la petrolera; no obstante, se espera que tales acciones eviten una baja en el rating crediticio.

Sin embargo, Pemex señaló en su presentación a inversionistas que logró objetivos como la estabilización de la producción de crudo, la reducción en el saldo de su deuda, disminución del robo de combustible, no recurrir a deuda para su financiamiento y la baja de la tasa del Derecho de Utilidad Compartida (DUC).

“Todos estos cambios se observarán de manera gradual en estados financieros de los próximos trimestres (…) nuestro plan de negocios se estableció en un periodo de transición de tres años. El primer año estuvo dedicado a resolver los problemas estructurales y sentar las bases de una nueva política de gestión operativa y financiera de Pemex.

“A partir de 2020, iremos consolidando estas iniciativas para alcanzar en el año 2021 el equilibrio financiero de la empresa”, señaló la petrolera.

Añadió que los resultados están determinados aún por la inercia y los rezagos de los últimos años y la empresa se vio afectada negativamente por menores ingresos de ventas, especialmente menor exportación de petróleo crudo y por la elevada carga fiscal aplicable aún para 2019.

La pérdidas de la empresa productiva del Estado incluso fueron superiores a lo recaudado por el Impuesto Especial de Producción y Servicios de gasolinas, que fue de 268 mil 923 millones de pesos durante el ejercicio del año pasado.

Ramsés Pech, especialista y consultor del sector energético de la firma Caravia y Asociados, señaló que Pemex no llegará a la meta de producción si vuelve a subejercer presupuesto como en 2019 y añadió que es necesario que la Secretaría de Hacienda ‘baje’ los recursos de forma rápida o permita a la petrolera manejar el flujo de efectivo antes de impuestos.

“Pemex no tiene recursos en forma rápida en los tiempos que la operación lo pide; no podrá incrementar producción a menos que alguien le ayude a tener dinero en forma anticipada a la operación”.

La petrolera, al no tener dinero en forma rápida de acuerdo a sus planes de perforación, los tiene que diferir atrasando la producción; si no llega dinero en los tiempos que necesita, no van a llegar a la meta.

Pech dijo que en el balance financiero se ve que Pemex reduce ventas pero mantiene costos, favorece pasivos laborales y en la parte operativa hace lo que puede con el dinero que le está llegando.

La agencia Reuters señaló que los precios de la mayoría de los bonos en moneda extranjera de Pemex extendieron su declive después del reporte de pérdidas y que se sumó a una ola global de aversión al riesgo que los sacudió desde la semana pasada.

La pérdida contrasta con la utilidad integral de 2018, de 42 mil 972 millones de pesos y es la más alta desde 2010.

Compromisos actuariales por el sistema de pensiones de Petróleos Mexicanos (Pemex) aumentaron su lastre financiero en 2019.

De acuerdo con sus estados financieros del cuatro trimestre enviados a la Bolsa Mexicana de Valores, tuvo una pérdida integral por 658 mil 130 millones de pesos, equivalente a 34 mil 923 millones de dólares al cierre de 2019. La merma de la empresa del Estado es equivalente a 2.7% del Producto Interno Bruto (PIB).

La pérdida contrasta con la utilidad integral de 2018, de 42 mil 972 millones de pesos y es la más alta desde 2010. El reporte financiero y operativo de la petrolera detalla que este resultado se originó por un aumento de 309 mil 468 millones de pesos en pérdidas actuariales por beneficios a empleados —sistema de pensiones—, por una reducción en la tasa de descuento, que pasó de 9.29% en 2018 a 7.53% en 2019.

Luis Miguel Labardini-Deveaux, socio de la firma Marcos y Asociados, y especialista del sector energético, señaló que las pérdidas actuariales por beneficio a empleados muestra el grave problema del pesado pasivo laboral en Pemex.

Es un compromiso financiero adquirido en el Contrato Colectivo de Trabajo que al final se carga a sus resultados financieros, y que hoy por hoy «es una bola de nieve que sigue creciendo… es un pasivo que se tiene que reconocer». Indicó que es necesario hallar una solución, una fórmula «porque el próximo año va a ser igual».

Dijo que en 1990 el problema del pasivo laboral de Pemex se resolvía con 3 mil millones de dólares, pero el gobierno federal no tuvo voluntad ni política ni financiera para resolverlo. Actualmente ese problema representa compromiso para la empresa de 76 mil millones de dólares por una plantilla de 125 mil 735 trabajadores, entre empleados de confianza y sindicalizados.

Lastre financiero y operativo. En pérdidas netas, la empresa reportó un saldo negativo de 346 mil 135 millones de pesos (18 mil 367 millones de dólares), pero si se suma la pérdida actuarial por el beneficio a empleados, da como resultado la pérdida integral total.

La Dirección Corporativa de Finanzas de Pemex argumenta que cerró «uno de los años más complejos en la historia reciente de Petróleos Mexicanos»… dado que la situación operativa y financiera estaba determinada por varios factores negativos, entre ellos:

La producción mensual de petróleo crudo cayó a una tasa promedio mensual de -0.65 %, y la inversión en exploración y producción en el periodo 2015-2018 retrocedió a tasa promedio anual real de 13.2%; el endeudamiento neto en 2018 fue de 52.4 mil millones de pesos y se tenía el reto de pagar o refinanciar casi 25% del total de los pasivos en la primera mitad del sexenio; el robo de combustibles promedió 56 mil barriles diarios en 2018, y se tenía el gran problema estructural del régimen fiscal.

En materia operativa, la petrolera informó que la producción total de hidrocarburos promedió 2 millones 405 mil barriles diarios de petróleo crudo equivalente. «En términos relativos —agregó—, representa una disminución de 111 mil barriles diarios o 4.4% con respecto a 2018», subrayó.