•En febrero cometió doble feminicidio en Juchitán
•El elemento estuvo bajo el mando de Manuel Vera Salinas
Un exelemento de la Policía Estatal que egresó de las primeras generaciones de la Unidad Policial de Operaciones Especiales (UPOE), fue detenido luego de varios meses de haber presuntamente asesinado a dos mujeres y un hombre en el mes de febrero del año en curso, en la Novena Sección de Juchitán de Zaragoza en la región del Istmo de Tehuantepec.
De acuerdo con la carpeta de investigación, el sujeto llegó hasta el domicilio de las víctimas en una camioneta marca Ford tipo Explorer de color guinda, donde bajó junto con otros dos cómplices fuertemente armados y comenzaron a dispararle a las víctimas identificadas como Reyna A. V, Berdain y Nataly J. A.
Tras estos hechos, se investigó y se encontró que el detenido identificado como Alberto L.T., alias «El Chebeto», formaba parte de una célula criminal que se hace llamar «Los exUPOES» y que opera en la región del Istmo de Tehuantepec bajo la protección de otros mandos policiacos.
Los exUPOES está integrado por elementos que fueron dados de baja o que desertaron de la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca, sin embargo, al tener el grado de UOPE, los hace contar con habilidades especiales, toda vez que esta categoría lo consiguieron dentro de la dependencia al formar parte de un adiestramiento especial, que pone a prueba su rendimiento físico, emocional y de salud.
Esta escuela fue implementada por Manuel Vera Salinas, Secretario Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública de Oaxaca (SESESP), y el detenido era de lo que estaba bajo su mando.
La orden de aprehensión se llevó a cabo sobre la Riberas del Río a la altura de la Unidad Deportiva «Neza Gente», entre Ribera del Río y Calle Mejía, en la Séptima Sección de Juchitán de Zaragoza.
«Venía operando en la Ciudad de Juchitán de Zaragoza y poblaciones aledañas, lugares donde tenían el control del narcomenudeo, secuestros, extorsiones y una serie de ejecuciones», señalan las denuncias.
Las autoridades buscan que las víctimas indirectas rindan sus declaraciones, pero tienen miedo, toda vez que hay supuestamente mandos policiácos que han sido cómplices de este grupo criminal.
