
Redacción – Wilfrido Hernández Cardozo
El 19 de marzo de 2025, el ex candidato a gobernador por el partido Nueva Alianza, Bersahín López López, se vio envuelto en un incidente en San Pablo Etla, Oaxaca, que inicialmente fue interpretado como un atentado armado. Sin embargo, las autoridades locales han ofrecido una versión diferente, desmintiendo los rumores y sugiriendo que se trató de un accidente vehicular.
Según la Fiscalía General de Oaxaca, se descarta que se haya tratado de un atentado. En un comunicado oficial, las autoridades explicaron que el incidente fue un choque entre dos vehículos. De acuerdo con el informe, López viajaba en su camioneta cuando fue impactado por otro vehículo, el cual, después del incidente, huyó del lugar. En ese momento, los primeros respondientes encontraron al ex candidato en el lugar, y se realizó una inspección que confirmaría que no hubo signos de un ataque armado.

Por otro lado, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) del Gobierno del Estado también se pronunció sobre el incidente. En un informe preliminar, la SSPC aseguró que se trató de un accidente vehicular, y que la denuncia inicial de la supuesta privación ilegal de la libertad de López no se confirmaba. Según las autoridades, los familiares de López reportaron que había sido secuestrado, pero al llegar al lugar de los hechos, la Policía Estatal determinó que no había sido víctima de ningún ataque armado ni de un intento de secuestro.

A pesar de las aclaraciones oficiales, el partido Nueva Alianza mantiene una versión diferente. El Comité Estatal del partido denunció lo que consideran un atentado contra su dirigente, Bersahín López, afirmando que fue atacado por un vehículo en movimiento mientras se desplazaba con su hijo menor de edad por la zona de San Pablo Etla. Según los representantes del partido, el hecho fue un acto de violencia dirigido contra López, y no un accidente común.

Este contraste de versiones ha generado incertidumbre y especulación tanto en los medios de comunicación como en las redes sociales. Mientras que las autoridades estatales insisten en que se trató de un accidente de tránsito, el partido político continúa reclamando que fue un ataque directo contra su dirigente, lo que refleja la complejidad de este suceso y la diversidad de opiniones sobre su naturaleza.
Este caso sigue siendo un tema de discusión en Oaxaca, y las autoridades continúan investigando los detalles del incidente para esclarecer los hechos.









