La situación en Siria se ha deteriorado en las últimas semanas, mientras Naciones Unidas pide a Estados Unidos y Rusia intervenir para restaurar la tregua y cuidar las frágiles conversaciones de paz.
El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, destacó el deterioro sustancial del cese de hostilidades e instó a los socios internacionales y a las partes enfrentadas a tomar medidas para restaurar la tregua.
De Mistura se reunió el martes con la delegación del gobierno sirio y también con una misión del grupo de trabajo que monitorea el cada vez más frágil alto el fuego sirio.
El opositor Comité Supremo para las Negociaciones suspendió su intervención en el diálogo formal que se celebraba en Ginebra, en protesta por supuestas violaciones del alto el fuego.
Se trata de la tercera ronda de negociaciones de paz para Siria, con las delegaciones gubernamental y de un bloque opositor político-armado que el mediador de la ONU consideraba como las únicas en capacidad de negociar.
“En las últimas 48 horas, hemos tenido un promedio de un sirio muerto cada 25 minutos y uno herido cada 13″, dijo el enviado especial a la prensa después de informar sobre las conversaciones de paz recién concluidas en la sede de la ONU en Nueva York.
“¿Cómo puedes tener conversaciones sustanciales si sólo tienes noticias de bombardeos y disparos?”, preguntó el enviado especial de Naciones Unidas.
Solicitó a los miembros del Grupo de Apoyo Internacional a Siria (ISSG) que se reúnan lo más pronto posible para que las negociaciones retomen su camino.
Estados Unidos y Rusia, los dos actores más importantes en el marco de ISSG, deben actuar de inmediato para restaurar la tregua y eliminar los elementos que pongan en peligro las conversaciones de paz, sostuvo el enviado.
La fecha exacta de la próxima ronda de negociaciones de paz en Siria será anunciada en mayo, señaló de Mistura.
En el campo de batalla este jueves destacaba el ataque aéreo contra un hospital en Alepo por el ejército sirio, con saldo de al menos 20 personas muertas, un ejemplo más del derrumbe del alto al fuego en vigor desde febrero pasado.
El ataque contra el hospital Al Quds mató a personal médico y varios civiles, entre ellos al Wasem Maaz, uno de los últimos pediatras que permanecía en la parte controlada por los rebeldes de esa ciudad siria. (Con información de Notimex)
