Migrante captada llorando en la frontera

Lety Pérez «desapareció» de su casa en Guatemala junto a su hijo una noche; días después y gracias a la viralización de sus fotos, su familia supo que estaba bien, bajo custodia de EU, tras ser detenidos por elementos de la Guardia Nacional

Guatemala, Lolina AmAya lloró la semana pasada cuando vio una foto viral de una madre guatemalteca implorando a un miembro de la Guardia Nacional que la dejara cruzar a Estados Unidos. Se trataba de su sobrina, Lety Pérez, quien habia pedido dinero prestado semanas antes y huido de su hogar protegida por la oscuridad de la noche, en busca de una vida mejor para su único hijo.

La foto, ampliamente compartida, la mostraba a unos metros de la fronterade México con Estados Unidos, aferrada a su hijo Anthony Díaz, mientras miraba al giardia.
«Estabamos llorando porque no habiamos tenido noticias de ella, ni del niño» conto Amaya, sentada en el frente del modesto hogar familiar, en el estado guatemalteco de El Petén.


Entrevistada en su casa,Amaya dijo que ella y su abuela de Lety habian visto las imágenes de ésta última y su hijo que fueron publicadas por Reuters y difundidas en internet.
Amaya lloraba cada vez que ponia el video del encuentro fronterizo. Ver a Pérez frente a un guardia nacional en los medios sociales la hacia saber que su sobrina esta bien.

La pequeña casa de madera que Amaya comparte con su padre y otros miembros de la familia está más al norte de Guatemala, una zona escasamente poblada conocida por sus ruinas mayas y la violencia relacionada con el tráfico de drogas.

Algunos residentes trabajaban en los campos de maíz o en los ranchos de ganado, pero los empleos son escasos. Amaya dijo manejar una pequela tienda o vende comida como tamales y empanadas, eran las únicas opciones para lugareños como su sobrina, que habian recibido escasa educación escolar formal.


Pérez soñaba con ahorrar para tener un hogar en Estados Unidos, pero tuvo que pedir dinero prestado para su viaje, detallo Amaya. Al no poder encontrar un empleo regular, tuvo que quedarse con su familia antes de irse con su hijo una noche. La partida fue tan repentina que la abuela no tuvo tiempo siquiera de «decir adiós», dijo Amaya.

Pérez rogó al guardia nacional que la dejaracruzar, le dijo que habia luchado por cria a su hijo en Guatemala después de que el padre los abandonó cuando el niño tenia nueve meses de edad.

Cuando el oficial les quitó la vista de encima, madre e hijo corrieron hacia la frontera de Estados Unidos, un momento que quedo registrado por la cámara del fotógrafo José Luis González, de Reuters. Allí, a ambos se los llevaron bajo custodia oficial, en Estados Unidos.

Amaya dijo que alguna vez intentó hacer un viaje similar. Nunca llegó a Estados Unidos, pero la madre de Pérez si lo logro. El lunes pasado, las autoridades estadounidenses liberaron a Lety y su madre la recogió en un aeropuerto en Carolina del Norte.

Lety podria tener la opción de buscar asilo en Estados Unidos, pero el proceso ya no garantiza a los migrantes el derecho de permanecer en el pais mientras sus casos legales son procesados.

Bajo la política conocida como «Protocolos de Protección al Migrante», muchas personas son devueltas a las ciudades de la frontera norte de México en lo que se resuelve sus solicitudes.

Además, Guatemala acaba de firmar un acuerdo con Estados Unidos para convertirse en un tercer país seguro y absorber a los solicitantes de asilo de países más al sur, como Honduras y El Salvador.

Dolores Morales, madre de Amaya y abuela de Lety, explicó que las condiciones de vida en el Municipio donde vivien, La Libertad, son muy difíciles. A pesar de los peligros del viaje al norte, añadió, su nieta sabia que era un riesgo que valia la pena tomar.

«Doy gracias a Dios de que haya llegado»dijo la mujer, juntandolas manos como en oración. » Se fue para garantizarle una vida mejor a su hijo».