Es el último día de homenaje para el maestro Toledo, quien falleció el pasado 5 de septiembre a la edad de 79 años de edad, víctima de un cáncer de pulmón que lo aquejaba desde hace algunos años.
Ciudad de México.- Decenas de personas continúan llegando al Palacio de Bellas Artes para darle el último adiós al artista oaxaqueño Francisco Toledo.
En el vestíbulo del recinto se montó una ofrenda, la cual incluye siete de sus obras, una fotografía del artista y decenas de papalotes.
Es el último día de homenaje para el maestro Toledo, quien falleció el pasado 5 de septiembre a la edad de 79 años de edad, víctima de un cáncer de pulmón que lo aquejaba desde hace algunos años.
En Oaxaca, en la intimidad y reserva y siguiendo la propia voluntad del pintor, se llevaron a cabo las honras funerarias en la que fuera su casa.
Toledo fue cremado el viernes y la familia no ha anunciado en qué lugar quedará la urna fúnebre de quien fuera exaltado en 2014, por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes como el artista vivo más importante de México.
Pero aún sin la presencia de los restos mortales de Francisco Toledo, los admiradores, amigos y artistas discípulos del pintor originario de Juchitán de Zaragoza, aún acuden al Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO), donde habitualmente se le veía al pintor, para dejar ofrendas florales y colocar una veladora en su memoria.
