En 2020, la taquilla de los cines mexicanos cayó 83 por ciento, que representa 15 mil 506 millones de pesos.
En 2020, la taquilla de los cines mexicanos cayó 83 por ciento, que representa 15 mil 506 millones de pesos, debido al cierre de las salas por la pandemia de Covid-19, revela el Anuario Estadístico de Cine Mexicano 2020 del Imcine, que da cuenta de que el año pasado la industria del cine en el país sufrió el mayor desplome.
Por ejemplo, en la producción de películas se reportó una caída de 49 por ciento con respecto a 2019. Se estima que alrededor de 300 proyectos de cine y audiovisual en etapa de producción fueron cancelados o suspendidos. Y en cuanto a la asistencia de público, se registró 84 por ciento menos que en 2019, lo que se traduce en 286 millones de espectadores que no ingresaron al cine durante el año pasado.
A ello se suma el cierre definitivo de complejos, que representan 149 pantallas apagadas en todo el país. Las sedes con más salas cerradas fueron Ciudad de México, con 41 espacios; Nuevo León, 22, y Guanajuato, 21.
“Estas cifras son un recuento sobre qué nos pasó sobre todo en el 2020, cómo se detuvo la producción, cómo se cerraron los espacios de exhibición y la suspensión de festivales o los que se pospusieron. Hablamos de lo que significó el confinamiento de las personas y que significó una reflexión en el cine mismo, además hacemos una reflexión sobre la migración a las actividades digitales y qué pasó con la producción y difusión de este año”, describió en conferencia María Novaro, directora general del Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE)
De las cifras también destaca que en ingresos generales, el cine mexicano cayó 78 por ciento, que representa mil 319 millones de pesos con respecto a 2019. Además, se registró 51 por ciento menos de estrenos que en 2019, pues en total se estrenaron 223 títulos de los cuales 47 son producciones mexicanas.
Respecto a los festivales y actividades cinematográficas, el 65 por ciento se realizó de manera virtual, el 13 por ciento lograron ser presenciales y 22 por ciento adoptaron un formato híbrido según el semáforo epidemiológico.
Si bien el panorama es desalentador, María Novaro indicó que se espera una recuperación con la reapertura de las salas, aunque será un proceso lento.
