Aumentos a tasa no bastarán para frenar inflación: Herrera

El exsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, habló en entrevista con El Financiero sobre el incrmento en tasas y los precios.

Fuente El Financiero / El recién nombrado director global de Gobierno del Banco Mundial, Arturo Herrera. (Lucía Flores)

El problema de la inflación global deriva de una situación muy compleja, por lo que tratar de abatirla por medio de incrementos de tasas de interés puede ayudar, pero no es suficiente, afirmó Arturo Herrera Gutiérrez.

En entrevista con El Financiero, el exsecretario de Hacienda y recién nombrado director global de Gobierno del Banco Mundial, expresó que el incremento de las tasas de interés tiene un efecto muy específico: disminuye la demanda agregada, básicamente porque encarece el crédito y por lo tanto reduce la inversión.

En este sentido, explicó que las mayores tasas de interés tienen un efecto para la inflación, pero hay que recordar que una parte de la inflación actual no viene por la actividad económica sino por distintas razones asociadas a elementos como el Covid o la guerra en Ucrania.

Añadió que es bien conocido que faltan microcomponentes, ya que hay una escasez de estas piezas, y por eso los vehículos están escasos y aumenta el precio, y “el incremento de la tasa de interés no va a hacer que los microcomponentes aparezcan, que es la causa última, eso es lo que hace muy compleja la situación hoy, se tienen elementos de demanda, otros asociados a una guerra y unos más vinculados a la pandemia, estos últimos dos elementos, no son tan fáciles de controlar a través de tasas de interés”.

Herrera enfatizó que la inflación global tiene tres grandes elementos: uno que es el propio Covid, que generó una disrupción de las cadenas globales de valor; otro es la invasión a Ucrania, que ha ocasionado que los precios de algunas materias primas, como el petróleo, gas, fertilizantes, etcétera, vayan para arriba y eso afecta la inflación; en tercer lugar, hay otras dinámicas muy específicas como la de Estados Unidos, donde se ve una recuperación muy acelerada.

Factores de inflación
“Entonces, estos tres elementos van a estar afectando el desempeño de la inflación, dependiendo de los países. Uno es que tan rápido se puede domar al Covid, para que se regrese a un funcionamiento de lo que considerábamos normal; dos, que tan rápido se puede resolver la crisis de la invasión de Rusia a Ucrania, y eso probablemente va a tomar algunos meses; y tercero, cómo se van ajustando los países a condiciones de mayor normalidad y ahí es donde estamos viendo los temas de aumento en la tasa de interés”, recalcó.

Expuso que parte de los proyectos en los que está trabajando el Banco Mundial actualmente están teniendo como eje de consideraciones una situación compleja por los tres temas ya mencionados.

Herrera Gutiérrez, quien asume su nuevo encargo de director global para temas de gobernanza del Banco Mundial el primero de julio, explicó que su labor cruzará con la responsabilidad de los casi 190 países que tienen membresía en el organismo multilateral.

“Hay tres áreas en donde se me va a pedir énfasis, uno es fortalecer el trabajo con las instituciones públicas en los países donde hay conflicto, fragilidad o violencia, como se sabe son Afganistán, Somalia y Sudán, entre otros”, apuntó.

Indicó que la segunda prioridad que le han marcado es asegurarse de que se aumente la efectividad de la gestión de finanzas públicas ligada a la parte fiscal, de tesorería y de compras, tanto hacia adentro del Banco Mundial para los proyectos como con los países.

“La tercera encomienda será la de asegurarme que la práctica de gobernanza tenga niveles de excelencia en todos los proyectos que tienen que ver con reformas del sector administrativo, hasta temas muy cercanos a los míos, de finanzas públicas, gasto impuestos, etcétera, así como temas de reforma judicial”, detalló.

El Banco Mundial también nombró a Luis Felipe López-Calva, director global de Pobreza y Equidad del organismo.

Cuenta con una maestría en Economía de la Universidad de Boston y una maestría y doctorado en Economía de la Universidad de Cornell; es director regional del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), para América Latina y el Caribe. Anteriormente estuvo en el Banco Mundial como economista principal y asesor regional sobre pobreza en la región de Europa y Asia.