IMSS cuenta con más de mil 800 voluntarios que brindan bienestar social y emocional

Personal voluntario del IMSS | Especial / Blanca Valadez - Milenio

Alejandra Aburto de Robledo, presidenta honoraria del voluntariado IMSS, destacó que profesionalizan al personal altruista para apoyar de la mejor manera.

Ciudad de México.- El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) cuenta con mil 867 voluntarios a lo largo del país que participan en programas de bienestar social y emocional de derechohabientes que reciben tratamiento por una enfermedad crónica.

Alejandra Aburto de Robledo, presidenta honoraria del voluntariado IMSS, destacó que profesionalizan al personal altruista para apoyar de la mejor manera a médicos y de enfermeras, así como a familiares de pacientes pediátricos con cáncer, adultos mayores y mujeres que recién tuvieron a su bebé.

Indicó que a través del canal digital educativo eduTKIMSS (https://edutk.imss.gob.mx/) los interesados en sumarse al Voluntariado IMSS realizan un curso y un examen de introducción a las actividades que se realizan, y posteriormente una entrevista para ser canalizados a la actividad en la que mejor se puedan desarrollar.

Por el Día Internacional de las y los Voluntarios, que se conmemora el 5 de diciembre, la especialista detalló los apoyos que llevan a cabo, entre estas, pláticas para la prevención del cáncer de mama y entrega de prótesis de mama artesanales para mujeres cuya línea de tratamiento fue la mastectomía.

  • Taller de manualidades, dedicado a familiares que permanecen por largo tiempo al cuidado de sus pacientes hospitalizados o que reciben tratamientos de larga duración.
  • El cafecito, donación de alimentos y bebidas, de acuerdo a las características y clima de cada estado, dedicados a apoyar la estancia de familiares cuidadores.

– Ludotecas hospitalarias, espacio dentro de las instalaciones hospitalarias donde pacientes y familiares cuidadores participan en lecturas y juegos, influyendo positivamente en el estado de ánimo, promoviendo el desarrollo de diferentes habilidades y la adaptación al nuevo entorno.

– Albergues, apoyo directo a los familiares con instalaciones donde pueden dormir, comer, bañarse, lavar su ropa y estar cerca de su paciente.

  • Bazar de Ringo, a través de la venta de ropa, juguetes y objetos donados, se recaudan fondos que se destinan a la compra de prótesis, sillas de rueda, andaderas y diversas necesidades de las y los pacientes.
  • Acompañamiento hospitalario y pláticas informativas sobredonación de sangre y órganos “A mis voluntarias el mensaje que yo les daría más que nada es gracias, gracias por ser tan entusiastas, por trabajar tanto, por siempre estar deseosas de hacer más, de crecer y de ser mejores, y que sigamos en la lucha y en la chamba, para que cada día seamos un Voluntariado más fuerte y más poderoso” enfatizó.