Defensa mantiene congelada la «medalla de campaña» para misiones como la de Irak

El Ministerio de Defensa mantiene congelado el desarrollo del reglamento y posterior concesión de la denominada «medalla de campaña», creada por el equipo de María Dolores de Cospedal en el Real Decreto 336/2018 de 25 de mayo, una semana antes de que triunfase la moción de censura.

Esta medalla cubría un vacío existente en aquellas misiones a las que acuden los militares españoles y no están bajo el mandato de la UE, la OTAN o la ONU. Es el caso, por ejemplo, de la misión contra el Daesh en Irak, donde España participa desde hace cuatro años y medio en una coalición de sesenta países liderada por EE.UU.


En estos momentos los militares que acuden a misiones amparadas por los organismos internacionales reciben la medalla correspondiente antes de regresar a España. Se considera un reconocimiento por su labor en la misión. En los casos históricos como el de Irak, hay algunos militares que regresaron con una «medalla de mérito» pero dada por otros países. «No todos la reciben y, lo principal, no corresponde al reconocimiento oficial de tu país», señala una fuente militar.

Publicado en el BOE del 12 de junio de 2018, el real decreto de creación de la nueva «medalla de campaña» establece, en la disposición final segunda que «faculta al Ministro de Defensa para que adopte las medidas necesarias que requiera la ejecución de este real decreto y, en particular, para determinar las normas sobre la medalla de campaña». Y corresponde al jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad) determinar qué operaciones militares y campañas en el exterior así como el área geográfica que se definirá como zona de operaciones a efectos de su concesión.

Así, un año y cuatro meses después de su creación, Defensa sigue sin desarrollar las normas para su concesión, algo que provoca malestar en militares de la misión de Irak. Unos 3.500 efectivos, también de la Guardia Civil que tendrían derecho a la medalla, han desplegado en estos últimos cuatro años y medio en la misión «Inherent Resolve».

Malestar
Fuentes jurídico-militares consultadas por ABC explican que «el hecho de que deba desarrollarse por una orden ministerial implica que la Unidad de Producción Normativa de la Secretaría General Técnica es la entidad encargada de impulsar su desarrollo». Este departamento se ubica dentro de la Subsecretaría de Defensa del Ministerio. El procedimiento para otorgarla, según el real decreto aprobado, se iniciará de oficio y adjudicándola el Jemad a propuesta del Comandante del Mando de Operaciones (CMOPS). «Pero todo sigue parado», se subraya.

La petición de esta medalla fue impulsada en 2015 por el coronel de la Legión Julio Salom Herrera, primer jefe del contingente español desplegado en la misión de adiestramiento de las tropas iraquíes contra el Daesh. «El objetivo era que esta actual misión en Irak no quedase sin medalla como ya sucedió con las anteriores operaciones en territorio iraquí: Operación Alfa-Kilo (1991, con Felipe González como presidente) y Operación Libertad Iraquí (2003, con José María Aznar)», explican.

A diferencia de la Medalla al Servicio de la Política Común de Seguridad y Defensa (UE), la Medalla OTAN o la Medalla de la ONU, que este nuevo reconocimiento se denomine «medalla de campaña» (carácter más belicoso a diferencia de «medalla de paz») ha podido influir en la actual dejadez del Ministerio por desarrollar su normativa. En la actual misión de Irak se han concedido Cruces al Mérito Militar por acciones destacadas pero este reconocimiento no es el específico de la misión.