Barcelona tendrá una tasa de residuos que penalizará a los ciudadanos que menos reciclen

Barcelona tendrá desde el próximo año una nueva tasa de residuos con la que el Ayuntamiento quiere incentivar el reciclaje doméstico y que en un primer momento costará entre 2,25 y 4,25 euros al mes por domicilio. La intención es que en un primer momento el precio quede fijado en función del gasto de agua y que a medida que se extienda la recogida de basuras puerta a puerta vaya variando en base a quienes reciclen más y quienes menos.

El consistorio, que defiende que los costes por reciclar son muy inferiores a los de gestionar los residuos, estima que en un primer momento la tasa mensual ascenderá a entre 2,25 euros y 4,25 euros por hogar para el 75% de los vecinos. Se estima que anualmente se recaudarán unos 40 millones de euros aunque en 2020 solo serán unos 18 millones de euros, ya que se calcula que hasta mayo la tasa no quedará aprobada definitivamente.

En este plan municipal para intentar acercarse a las exigencias de la Unión Europea en materia de reciclaje, tendrá un papel muy importante la contrata de limpieza, cuya licitación todavía no está resuelta. La futura contrata, que asciende a más de 270 millones de euros, entrará en funcionamiento en 2021 y contará con nuevos contenedores con los que los vecinos se identificarán al tirar la basura. Eso, junto a bolsas numeradas, ayudarán a «desenmascarar» a los vecinos que no reciclen o que lo hagan mal, que son los que pagarán más.

A día de hoy, en Barcelona solo se recicla el 37% de los residuos que generan sus vecinos y el municipio se fija el objetivo de llegar a un 50% de reciclaje en 2025. Las experiencias piloto para incrementar la recogida selectia, como el puerta a puerta en el casco antiguo de Sarrià, están dando muy buenos resultados.