Hay mucho más en la lucha internacional contra el coronavirus que las cifras que dan los noticieros sobre contagios y fallecidos.
Esta emergencia ha afectado la vida de miles de personas en Wuhan, quienes han perdido a seres queridos debido a la enfermedad o bien no pueden convivir con ellos por riesgo al contagio.
Tal es el caso de Liu Haiyan, una enfermera de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Popular del Condado Fugou, en China.
Haiyan trabaja todos los días con personas portadoras del Coronavirus 2019-nCov, por lo que, al igual que los pacientes debe mantenerse completamente aislada.
Esto ha provocado que en más de 10 días Liu Haiyan no haya podido convivir con su familia, y especialmente con su pequeña de 9 años.
Sin embargo, ayer mamá e hija pudieron reencontrarse en un ‘abrazo en el aire’ a varios metros de distancia.
‘Mamá volverá cuando hayamos derrotado al virus. Haz caso a tu padre en casa. Sé buena chica. Tras ganar esta batalla prometo que pasaré mucho tiempo en casa contigo.» le dice Haiyan en un video.
Acto seguido, la niña le acerca un paquete con comida para ella y sus compañeros. Después se aleja y Haiyan espera a que se vaya para recogerlo y evitar el contagio.
