Una nueva era para la economía, la política y la manera de vivir

El informe de Deutsche Bank señala que sin importar quien sea el próximo presidente de EEUU, la guerra comercial con China continuará en aumento. 

EU.-Un equipo de Deutsche Bank, encabezado por el director de Gerente y estratega del banco alemán, Jim Reid. Llevó a cabo un trabajo en el que se señala una nueva era en distintos aspectos de la vida política y económica.

De acuerdo al estudio de marras señala que el mundo está en la cúspide de una nueva que se caracteriza por el desorden.

Este desorden se caracteriza por el probable relajamiento de la globalización que creo el crecimiento voz de la economía.

Pesé la situación de la pandemia a nivel mundial, esta no ha sido la culpable del aceleramiento de la «era del desorden».

Además de la tensión entre las dos grandes potencias, Estados Unidos y China. Sin embargo, se prefiere a sus propios valores a los del liberalismo occidental.

Así mismo, se señala de un choque entre culturas e intereses que se han ido acrecentando conforme Chine va creciendo para tomara posición número uno en la economía mundial.

Reid contempla cinco súper-ciclos estructurales en los pasados 160 años, que reconfiguran todo, desde la economía, la política y la vida en general.

  1. La primera era de la globalización (1860-1914).
  2. Las grandes guerras y la depresión (1914-1945).
  3. Bretón Woods y el regreso en un sistema monetario basado en el patrón oro (1945-1971).
  4. El inicio del dinero Fiat y la era de la alta inflación de la década de los setenta (1971-1980).
  5. La segunda era de la globalización (1980-2020?).
  6. La era del desorden (2020-? -????).

Asi mismo, Reid señala que esta «era del desorden» implica profundas sacudidas políticas y socioecónomicas. Destacando el deterioro en las relaciones entre China y Estados Unidos.

China busca su restauración histórica como genuina potencia económica global. Esperando regresar con una participación del 16%.

Finalmente el informe de Deutsche Bank el mayor error en los años venideros es extrapolar las tendencias del pasado.

Y concluye que pese al próximo gobernante de Estados Unidos, la guerra entre las potencias continuará, sin llegar a un enfrentamiento nuclear.