¿De dónde sale el dinero para organizar los Juegos Olímpicos?

Obtener dinero para mantener el movimiento olímpico no es sencillo y a lo largo de la historia se han ingeniado diversas formas para generar recursos que son otorgados a las federaciones nacionales, el comité organizador de las competencias, pero también para la supervivencia del COI.

Tokio.-Tokio 2020 anunció en su último recuento que tendría 6 mil 700 millones de dólares a su disposición provenientes de diversos sectores, por ejemplo, 800 millones desde las arcas del Comité Olímpico Internacional, una cifra similar a la que esperaban obtener por venta de boletos pero que con la prohibición de público ante la pandemia por COVID19 no será así.

Los gobiernos locales y federales contribuyen con un importante pedazo de pastel. En el caso de Japón se trata de dos mil 100 millones.

Los patrocinadores son los mayores aportadores de la fiesta con 3 mil 300 millones de compañías locales, a los que se les suma un club selecto, que algunos consideran los amigos más íntimos del movimiento olímpico: las marcas que pertenecen al TOP (Programa de Socios Olímpicos), siglas que no fueron escogidas al azar y que hacen clara referencia al estatus de su relación con los cinco aros, con 500 millones de depósito a la organización japonesa.

Desde estampillas hasta la venta de la mascota

Vender un evento deportivo no es sencillo y menos en 1896 cuando Pierre de Coubertin lideró los Juegos Olímpicos de la era moderna, un evento lejano a lo que hoy conocemos. Pero el ingenio de inmediato se hizo presente y los gastos de Atenas de ese años se solventaron con venta de boletos para los eventos deportivos, pero también con estampillas postales conmemorativas al evento.

La publicidad en los escenarios deportivos de los olímpico hizo su aparición en 1924 mientras que cuatro años más tarde en Ámsterdam, la marca de refrescos Coca-Cola se convirtió en el primer patrocinador principal de la competencia, una relación que perdura hasta hoy en día.

En Munich 1972 fue la primera ocasión que se vendieron los derechos para el uso del emblema olímpico, hoy en día un elemento reservado para el selecto grupo de patrocinadores, pero también fue la primera ocasión que la imagen de la mascota tuvo una licencia comercial, un aspecto en el que solo Barcelona 1992 explotó en todo su potencial con Cobi, un personaje que hasta nuestros días es recordado.

El cerebro detrás de que más marcas se alinearan a los cinco aros en el programa TOP fue el español Juan Antonio Samaranch, presidente del COI desde 1980 hasta 2001 con poco más de 90 millones de dólares aportados por las marcas para el periodo de los juegos veraniegos de Seúl 1988 y los invernales de Calgary. La cifra creció a los 279 millones entre 1993 y 1996. En el periodo entre Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, el organismo deportivo recibió mil 3 millones de dólares por concepto de patrocinios.

Pero si hablamos del mayor impacto económico en las arcas del COI este inició en Londres 1948, que marcó la primera vez que una televisora pagó por los derechos de transmisión con la estatal BBC aportando tres mil dólares, una cifra que hoy está lejana de los 4 mil 380 millones de dólares que desembolsó la americana NBC en 2012 para asegurar todas las competencias del COI hasta Tokio 2020.

Es este rubro el que mayores ganancias genera al Comité Olímpico Internacional con cifras que se han ido incrementando en cada olimpiada. Por ejemplo, de 1993 a 1996 se recibieron mil 251 millones de dólares según informó el propio organismo. Esa cantidad se duplicó entre 2001 a 2004 con 2 mil 232 millones. En el periodo de 2013 a 2016 se alcanzaron los 4,157 millones, por lo que todo apunta a que después de Tokio 2020 se alcanzará la cifra de los cinco mil millones de dólares.

Las cantidades son similares a las que obtiene la FIFA por los derechos del ciclo de cuatro años vinculados a la Copa del Mundo. Por ejemplo, el máximo organismo del balompié logró para Sudáfrica 2010 2 mil 400 millones de dólares en derechos de transmisión. En un periodo similar, entre Beijing 2008 y Londres 2012 el COI consiguió 3 mil 850 millones de dólares.

Sin embargo, todo ese dinero no se queda en el Comité Olímpico, quienes estiman que cada día se aportan 3.4 millones de dólares, entre comités nacionales, asociaciones, entre otros organismos, dedicados a la expansión del espíritu olímpico, lo que significa que al año mantener la llama viva equivale a mil 241 millones de dólares.